LA MÚSICA ELECTRÓNICA

EN LA EUROPA DEL ESTE

Capítulo 5

Por: Jorge Munnshe


Pretender glosar en una única mini-serie de artículos el universo musical por décadas emparedado tras el telón de acero, es imposible. Una aproximación básica a la realidad de la vanguardia musical en cada una de las múltiples y ricas culturas de esa gran desconocida que es la Europa del Este, en plena efervescencia, ocuparía un libro. Por tanto, esta mini-serie será sólo una fugaz visión, a la fuerza incompleta, de ese vanguardismo sustentado en culturas tanto o más añejas que las del resto de Europa.

REPUBLICA CHECA / REPUBLICA ESLOVACA (ANTIGUA CHECOSLOVAQUIA)

El primer nombre que con facilidad nos viene a la mente es el del famoso Jan Hammer, que sin embargo tuvo que desarrollar su carrera en Estados Unidos, y que es conocido sobre todo por su faceta Pop.


Martin Kratochvil

Con el cambio político que culminó en la división de Checoslovaquia en la República Checa y la República Eslovaca, salió a flote una importantísima cultura de nuevas músicas. Aunque antes se sabía algo de ella, básicamente a través del Festival de Música Contemporánea de Praga, y la escena de Rock progresivo que trascendió al extranjero, ha sorprendido bastante en occidente la variedad y riqueza de sus nuevas músicas. Algunos de estos artistas gozan del prestigio internacional.

Procedente del ámbito académico, Rudolf Ruzicka, es un compositor que ha combinado la enseñanza con la composición. Se trata de uno de tantos pioneros electrónicos desconocidos en Occidente. Nada menos que en 1965, ya hacía música con ordenador. Ha escrito numerosas piezas para orquesta y sintetizadores. Fue galardonado en 1970 y en 1984 con premios internacionales. Tiene publicado un libro sobre el uso de los ordenadores en tareas artísticas. Me dijo que en el momento de su edición era el único libro en checo que describe detalladamente la composición mediante ordenador.



Al sintesista Otakar Olsanik podríamos calificarle como "la otra cara de la moneda" de Rudolf Ruzicka, ya que procede del Rock, es autodidacta, y sin embargo goza del mismo prestigio como artista y pionero. Además, su vida ha sido muy "novelesca". Significativamente, me dijo que no sabía por dónde empezar a narrar sus vivencias. Su formación en electrónica, le sirvió para ser uno de los integrantes de la primera banda checa en usar guitarras eléctricas (Electrofonic), con la que grabó diversos álbumes y dió giras en Checoslovaquia. Luego marchó a los paises escandinavos como guitarrista de un grupo Rock e inició su carrera en solitario tras montar un estudio con tecnología noruega. Tuvo gran éxito, pues su música sonaba casi a diario. En la actualidad, pasa 5 meses al año en Noruega, trabaja con ordenadores y samplers, y hace bandas sonoras, aunque de vez en cuando compone alguna que otra canción Pop para su esposa Kamila, que es cantante. Ha participado en el festival austriaco de música por ordenador y artes interactivas, Ars Electronica. Allí fue donde supe de él por primera vez.


Jan JirasekNacido en 1955, Jan Jirasek estudió piano y composición. Más tarde, música electroacústica, siendo alumno de Rudolf Ruzicka. Me confesó que tras graduarse, sufrió una época de boicot gubernamental debido a sus opiniones políticas. A consecuencia de ello, el reconocimiento artístico de su música tuvo que venirle exclusivamente del extranjero, hasta lograr salir de la lista negra. Sus actividades engloban la composición de bandas sonoras y la investigación de nuevas formas de música. El Instituto de Tecnocultura de Paris ha publicado algunos de sus estudios. La Radio de Munich ha difundido conciertos de música escrita por él. Desde 1990 es director del Estudio Experimental de la Radio Checoslovaca, en Praga.

Elia Cmiral estudió música en el Conservatorio de Praga, y se marchó a Suecia en 1979, donde estudió música electroacústica, mientras componía para el Teatro Dramático de Estocolmo. Posteriormente, hizo música para ballet en Alemania, Estados Unidos y Suecia, así como sus primeras bandas sonoras para films, spots publicitarios y documentales. Uno de ellos fue nominado en el Festival de Cannes de 1988, y otro recibió el Segundo Premio en el Festival de Rotterdam en 1991

Jan Jirasek



Daniel Forró es un estupendo músico y compositor, que estudió piano, flauta, organo, y composición. Ya en los años ochenta, todavía en la Era Comunista, trabajaba con un equipamiento similar al de cualquier profesional occidental, y hacía música para ballet, cine, televisión, y publicidad. Su volumen de trabajo era muy grande. Sin embargo, el área que más le interesaba era la de la música electrónica y las nuevas músicas en general. Había venido produciendo sus trabajos independientemente de las instituciones oficiales de su país, lo que le impidió distribuirlas de forma conveniente. Fue uno de los escasísimos artistas independientes checos trabajando de manera profesional antes de la Perestroika. En sus composiciones trataba ya entonces de abrazar los más diferentes elementos de la música global europea, desde los cantos gregorianos a las más complejas técnicas de composición del siglo 20, el folklore mundial, y algunos toques de Jazz y Rock. En mi último contacto con él, este polifacético artista estaba finalizando un libro sobre tecnología musical.



Jiri Strohner

JiriJiri Stivin es un flautista y saxofonista que ha trabajado con artistas de muchos países y que lideró su propia banda.

El guitarrista Lubos Andrst ha estado envuelto en diversos grupos de Rock progresivo. Martin Kratochvil fue pionero en el Jazz electrónico. Hay que mencionar también al teclista Emil Viklicky, el guitarrista Michal Pavliceka las bandas Progress-2, Olympic y Bohemia, que hacían música vanguardista que no gustaba a las autoridades, y a los músicos Jiri Strohner, Jiri Hradec, Pavel Kopecky y Michal Kocab.




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